Cualquiera que haya visitado alguna vez Peñafiel en las últimas décadas, seguro qué ha pasado por el Mesón el Corralillo. Un lugar qué es visita obligada para quien quiera disfrutar del plato estrella de la gastronomía ribereña, el lechazo asado, en una bodega subterránea de estilo tradicional. Durante mucho tiempo al frente de este legendario restaurante estuvo la familia Cristóbal y era habitual ver a Salvador abridor en mano sirviendo buen vino de Ribera del Duero. Por eso no es de extrañar que el hábito se convirtiera en pasión, esa pasión en deseo, y el deseo en realidad. Hoy en Quintanilla de Arriba se encuentra Bodegas Quintafiel. Tienen ya un vino de Ribera del Duero en el mercado y grandes proyectos por acometer. De todo ello hablamos con Salva en una Cita con Ribera.
¡Visita el perfil de la bodega para descubrir más!
#ConRiberaSí #RiberadelDuero #CitaconRibera